La maqueta arquitectónica ha sido durante muchos años un componente fundamental en la industria de la construcción. Con los avances tecnológicos de hoy en día, las maquetas arquitectónicas se han convertido en un elemento esencial de la industria de la arquitectura.
Las maquetas son necesarias durante la planificación y estimación de costos de proyectos de construcción. Entre los diferentes tipos de maquetas arquitectónicas, se pueden presentar maquetas de oficinas, terrenos y ubicaciones (fábricas, instalaciones deportivas, hoteles, viviendas masivas, etc.), modelos de renovación urbana y maquetas de interiores (perspectiva interior).
La construcción de una maqueta arquitectónica
La construcción de una maqueta arquitectónica implica la obtención de materiales y su corte según la escala especificada. Los constructores de maquetas a menudo utilizan una combinación de elementos para reflejar realistamente el diseño. La estructura del edificio se diseña para luego crear la fachada exterior. Se pueden realizar estudios separados para balcones, decoraciones y otras partes que luego se ensamblan. Los elementos arquitectónicos incluyen componentes diversos como patrones de pared, ventanas, puertas, vegetación e iluminación.
El proceso de construcción se completa mediante el uso de color. Los arquitectos paisajistas eligen cuidadosamente colores, texturas y detalles estructurales para los componentes de la maqueta y los aplican con precisión.
Características de una maqueta arquitectónica
Las maquetas arquitectónicas ponen énfasis principalmente en el aspecto de la rehabilitación de edificios. Sirven como una herramienta convincente ante jurados de arquitectura y administraciones municipales. Ilustran la integración de edificios en un terreno para asegurar comodidad y seguridad.
Las maquetas arquitectónicas se distinguen de otros tipos de maquetas por su representación clara de todos los elementos sociales, educativos, económicos y privados.